Hace dos meses tuve la maravillosa oportunidad de viajar a Colombia y Chile, después de dos años sin poder viajar al exterior debido a la pandemia. Disfruté mucho el viaje junto a mi hijo Timothy; fue muy especial ver a mis hermanos en Cristo y ayudar con la predicación y enseñanza de la Palabra de Dios en diferentes lugares, pero una de las cosas más maravillosas fue poder ver a mi mamá cara a cara y pasar unos días con ella. 

Ver a un ser querido en persona, no tiene precio. Es mucho mejor que cualquier reunion por Zoom, o una video llamada por WhatsApp. Ahora que las restricciones para viajes internacionales han sido quitadas en muchos países, muchas personas se están reencontrado con sus seres queridos.

Los que hemos creído en el Senor Jesucristo también anhelamos el momento cuando veamos a nuestro Senor cara a cara. Hoy en día disfrutamos conocer más de El por medio de la lectura de la Biblia y la oración, y también cuando nos congregamos en su nombre, especialmente al celebrar la Cena del Señor, pero un día vamos a verle en persona, cuando lleguemos a su presencia. Pablo escribió que un día el Senor nos llamará a su presencia, y entonces los muertos en Cristo resucitarán primero, y luego “… los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.” (1 Tes. 4.17)

¡Qué día tan maravilloso será cuando le veamos cara a cara! Apocalipsis 21.4 dice “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.” 

Y usted, lector, tiene usted esa seguridad de algún día ver al Senor y estar con El para siempre? Solo hay una forma de estar seguro de esto: creyendo en el Senor Jesucristo como dice la Biblia. Y es que el problema es que nuestros pecados no nos permiten estar en la presencia del Senor, y por eso El derramo su sangre en la cruz, cuando llevo el castigo de nuestros pecados al morir, y luego resucitó de entre los muertos. El vive, y quiere que seas salvo para que puedas estar con El para siempre, pero debes ir a El entendiendo que como un pecador le necesitas a El como tu salvador. Hoy puedes creer en el Senior Jesucristo, y así serás salvo, y un día podrás verle cara a cara, para estar con El por toda la eternidad.

Willians Alcalá